Hola , El lunes pasado compartía una relajación para empezar la semana desde un lugar distinto, de mayor calma y presencia. ¿Qué tal fue? ¿Tomaste tiempo para ese encuentro con tu calma y cambiar tu estado para comenzar la semana? O sólo pensar en tomar el tiempo para seguir el audio, te hacía sentir más nerviosa y te escuchabas diciéndote «Buffff lo que me faltaba, perder el tiempo, con todo lo que tengo que hacer». Sea lo que sea que te haya ocurrido, está bien, es una información muy valiosa para ti. Muchas veces nos dejamos llevar por lo que es habitual en nosotras. Yo he estado en ese «No tengo tiempo para nada» mil veces. Cambiar y tomar yo el tiempo para observarme, escucharme y darme cuenta, me ha ayudado a tener conciencia de todo lo que cambia a mi alrededor cuando me permito y cojo yo tiempo para cultivar mi calma y observación. Ahora sé que este es el primer paso para empezar a transformar cosas y avanzar en mi vida. En una ocasión un gran profesor me dijo, «Uno es tan bueno cómo su estado interno». Esa fue una de esas veces que se abre un gran aprendizaje y te dices «Siiiii». El beneficio mayor es que al parar unos minutos y observar mi estado a través de pensamientos, emociones y sensaciones en mi cuerpo, me doy cuenta de lo que me preocupa y puedo ocuparme de ello, dejando mi mente más despejada y con mayor silencio, mis emociones más pausadas y menos reactivas y mi cuerpo más relajado y abierto. Ocuparme de lo que me preocupa me permite a avanzar. Seguramente hay días, semanas, meses, en los que estás más dispersa, que te cuesta más centrarte y te da la sensación de que vas apagando fuegos por todos lados y que no avanzas. Toma esto como un indicador para parar y escuchar, desde otro lugar, qué es eso que te mantiene inquieta y cómo priorizar. Te vas a dar cuenta de que a veces pensamos que es una cosa la que es más importante y resulta que hay otra que nos viene a la mente en cuanto nos concedemos el tiempo para estar 5 minutos con nosotras mismas. Es cuestión de practicar este parar, soltar tensión y observar. Una vez que se convierte en un hábito te das cuenta de lo mucho que te aporta. Al principio toma tú el tiempo para practicar. No esperes a tener tiempo esto suele fallar. Cuando te vengan estos pensamientos, sensaciones de tensión o emociones durante un rato de silencio o relajación, simplemente date las gracias por la información. ¡Ya te has dado cuenta de qué es lo que te preocupa, vuelve a la relajación, a tu respiración, sin más. En nada vuelve otro pensamiento, otra sensación, otra emoción. Está bien, es otra cosa que te está sacando de ti misma y dispersando. ¡Qué bien saberlo! Vuelve a dar las gracias y vuelve a tu respiración al inhalar y exhalar. A un niño pequeño que está aprendiendo no le estarías dando prisa para aprender a leer si todavía no ha aprendido las letras. Haz lo mismo contigo, cuando te descubras diciéndote: «Esto no es para mi», «Esto me pone más nerviosa», » Yo no puedo hacer esto» «No tengo tiempo». Date cuenta de que estos pensamientos son precisamente los que te están manteniendo en esa espiral automática de no salir del run, run, mental, el malestar emocional y la tensión corporal. Te ánimo a probar de nuevo y que esta semana sigas este otro audio de tan solo 7minutos. Y mientras lo haces, tan solo date cuenta de dónde va tu mente, que te dices cuando vienen pensamientos, qué sensaciones tienes, qué te saca de permanecer en tu respiración. No te enjuicies, en vez de decirte por ejemplo: «Buff que horror yo no aguanto ni dos minutos» cambia y dite a ti misma «Interesante los viajes que hace mi mente en tan poco espacio de tiempo, las sensaciones o falta de sensaciones en este tiempo». ¡Siete minutos para darte cuenta, 7 minutos para aprender de ti misma! A por ello. Si te animas a escribirme y contarme cómo ha ido, me encantará conocer tu experiencia Yo me propongo esta semana agradecer todo lo que me haga estar consciente de: Dónde va mi mente, cuando quiero estar en calma. Qué emoción está más activa en el momento de tomar el tiempo para calmar ( tristeza, enfado, miedo, rechazo, sorpresa o alegría). Qué sensaciones en mi cuerpo están más activas, cómo tensiones, dolores, bienestar… A por una semana estupenda. ¡Seguimos adelante! Blanca |